Fuente:
El Mundo.
La ecuación que usa Steve Ballmer, CEO de Microsoft, sobre el escenario de la feria Consumer Electronic Show (CES) de Las Vegas para predecir el futuro es muy sencilla: PC más móvil más televisión más Internet. Tres pantallas conectadas por una nube de servicios que facilitarán nuestra comunicación e información constante. Es el primer discurso inaugural de Steve Ballmer en la feria, un puesto tradicionalmente reservado para Bill Gates que ha heredado tras la retirada del fundador de Microsoft, y en él queda claro que, en este CES, la unión de la vieja caja tonta con los servicios de la Red y otros dispositivos de la casa es el tema candente.
Unos días antes otro relevo importante se produce en San Francisco. La feria Macworld, que desde hace años empieza con un discurso de Steve Jobs, tiene que conformarse con Philip Schiller, vicepresidente de marketing de producto y digerir una pésima noticia: a partir de 2010, Apple abandona la feria y presentará sus productos a su ritmo, sin forzar una fecha en el calendario. IDG, organizadora del evento, continuará con la cita, pero sin su principal expositor, su futuro pende de un hilo.
Dos empresas, dos sucesores, dos citas que marcan el ritmo que seguirá la industria durante el resto del año, probablemente uno de los más complicados a los que se ha tenido que enfrentar el mercado de la electrónica de consumo. En el CES, a pesar de la grandilocuencia de los discursos, hay menos movimiento: 300 empresas menos que el pasado año, y también una caída en el número de visitantes. Pocas ferias son inmunes. El SIMO tuvo que ser cancelado en Madrid el pasado mes de noviembre por la situación económica del sector. La organización prometió adelantar en navidades la estrategia para la edición de este año, pero hasta ahora no se ha puesto en contacto con los medios de comunicación para dar detalles.
En San Francisco, Macworld es más grande que nunca, pero Apple no arma revuelo y mantiene un perfil discreto durante su última intervención. A la feria se ha traído sólo un nuevo portátil, el Macbook Pro de 17 pulgadas. Es una apuesta arriesgada, a diferencia de otros portátiles, no tiene una batería extraíble. La compañía del iPod ha optado por una interna no intercambiable para conseguir crear el portátil de 17 pulgadas de pantalla más fino y ligero del mundo —2,5 centímetros de grosor, 2,9 kilos de peso—. Schiller trata de calmar a los escépticos con dos buenos datos: aunque la batería no puede extraerse, tiene una autonomía de ocho horas. Es como llevar la batería de repuesto siempre encima. Además, aguanta hasta 1.000 ciclos de carga completa, tres veces más que otras baterías de portátiles en el mercado y suficiente para más de tres años de vida.
Al igual que los Macbook presentados a finales del pasado año, el nuevo Macbook Pro está fabricado a partir de un único bloque de aluminio tallado y cuenta con un trackpad sensible a la pulsación con varios dedos y a los gestos. La pantalla incluye un acabado brillante, pero existe la posibilidad de comprar una versión en acabado mate.
En Las Vegas, Ballmer apuesta por una enorme variedad de dispositivos en un amplio abanico de precios. «Ahora más que nunca es cuando la gente necesita una variada oferta de productos y un gran rango donde elegir», asegura durante su intervención.
Se reserva para esta feria nuevas sorpresas en la gama Windows y, entre ellas, una versión beta del nuevo Windows 7, el sucesor de Vista, que cualquier usuario puede ya bajarse de la Red. Es la primera vez que Microsoft ofrece de forma masiva un sistema operativo para descarga. «Queremos que lo probéis ya y descubráis lo rápido, eficiente y ligero que es», dice Ballmer a la audiencia del discurso inaugural. La compañía cortará el suministro de versiones beta cuando haya sobrepasado los 2,5 millones de unidades.
La versión final podría llegar a finales de 2009 y, de ser así, convertiría a Vista en uno de los sistemas operativos de vida más corta en la historia de la compañía. A pesar de ello, Ballmer afirma en Las Vegas que la marcha de Vista es buena y que cuenta ya con 100 millones de usuarios activos y 80 millones de licencias que aún no se han activado, pero que ya están instaladas.
SERVICIOS ‘ON LINE’. Windows 7 es sólo una de las patas en las que se apoya la estrategia de Microsoft para los próximos años. Su gama de servicios on line Live y de búsqueda se arrastra detrás de las herramientas de Google, pero en Microsoft han anunciado dos acuerdos que podrían servir para aumentar bastante las cifras de visitantes.
El primero, con Facebook, permitirá que los perfiles y avisos de Live estén actualizados con la información que el usuario añada a su perfil de Facebook. El segundo es un acuerdo para la compañía Dell para que, a partir de ahora, incluya la herramienta de búsqueda de Microsoft por defecto en todos los nuevos ordenadores.
Además, Live ha actualizado algunas de sus herramientas para que estén mejor integradas. Charlotte Jones, gerente de grupos de producto de Microsoft, aprovechó una pequeña intervención para mostrar una función que se instalará próximamente en los servicios de correo de Live y que permitirá buscar un texto, un número o una dirección en la web sin tener que cambiar de ventana o de pestaña.
Tanto si consigue ganar cuota de mercado con estos acuerdos como si no, la estrategia de Microsoft pasa ahora por centrarse en la navegación desde el móvil. A mediados de este año presentará la nueva versión del sistema operativo Windows Mobile, la 6.5, que entre otras sorpresas incluirá un navegador capaz de mostrar contenido en flash en su pequeña pantalla.
En el CES, sin embargo, los discursos se centran también en la nueva tendencia clave de la industria: la tecnología verde. Desde televisores que consumen menos a ordenadores con menor necesidad de ventilación. La fiebre por la palabra «eco» se ha adueñado de Las Vegas.